Baste que pases, ¡allí está!, esperándote, con sus mejores galas y ornamentos, mirando para ti, a ver ¿qué haces? Le gusta mirar tu indecisión, ¡quizás mañana!, tu cara de asombro ante su disposición... el escaparate está bien iluminado, las luces logran resaltar todos sus matices, los blancos y rojos, los marrones y verdes, y tú, yo y todos lo observamos, con la misma intensidad, mientras una gota de saliva corretea por nuestras bocas.
Y sigue allí, esperando, miras... a ver, ¿tienes? hoy no, tal vez mañana, y mientras tanto... otro se lo lleva, desconsuelo, ¡cómo se va a poner...! El de dentro, que te conoce, trae otro, más fresco y guapo que el primero, y la gota es un charco y el charco un torrente, te vas..., vuelves, la última mirada, sigue allí, radiante, ves como te mira, te invita con gritos callados, te tiene... ya volverás, lo sabe, mientras tanto, quieres quitártelo de la mente, no puedes...
Mañana, seguro, será mío, no se lo perdono, tiene que serlo, notas el vacío en el estómago, pero mañana... ¡ah, mañana!
Jó, si hasta a mí se me van los ojos! jajajaja
ResponderEliminarUn besito, no sé como he caído por aquí pero me encanta y me quedo! ;)
¿Es posible que el dulcito te haya llamado como a todos?
EliminarOtro para ti...
Ummmmm ahora te da por el vicio del chocolate???? mira que eso denota falta de.... MARCHAAAAAA. Mardito Roedó.
ResponderEliminarComo explicártelo iba a ser muy largo y demasiado complicado para ti, vamos a dejarlo, no te imaginas tú cuántas utilidades tiene ese chocolate, y si es con merengue, más... Roedó de la pradera...
EliminarAy, José, leerte ha sido un golpe bajo porque soy tremendamente golosa y créeme que lo has descrito de una manera que lograste hacerme la boca un mar de placenteras sensaciones..UHmmmm!
ResponderEliminarUn abrazo y...dulce semana ;)
Me encanta, ¡hay que ver cuánto goloso andamos por la red!, pues sí, un mar y alguna exageración más.
EliminarUn secreto, este post va dirigido a todos aquellos que andan por la vida pasando penurias por no coger unos kilillos de más, je je...
¡Malditas tentaciones! pero...yo no me pribo y tú tampoco deberías, a no ser que sea por causas de salud entonces ¡con los médicos hemos topado! No coma, no beba, no fume, no f.... ¿entonces para que que vive uno? p´a trabajar solo!
ResponderEliminarBesos achocolatados.
¿Médico?, vas a mirarte por primera vez y te llevas mil enfermedades y el complementario. De momento, hasta que la salud me diga lo contrario, estoy haciendo la dieta de "dejar de dejar de comer", me va del quince... Ando orondo, pero vistoso, y sobre todo disfruto de la comida, sobre todo cuando la hago yo...
EliminarAl dulce a lo mejor le venía bien un espolvoreadito de gofio...
A los besos, crema con gofio...
Hay momentos obsesivos...pero qué placer!!!
ResponderEliminarun poco de indulgencia a veces cae bien. Me ha gustado mucho tu forma de resistencia, casi dialogada con la tentación.
Un placer, José.
Me encantan los momentos obsesivos, son los mejores. Tal vez el próximo día tenga para llevármelo, y entonces... ¡ah, entoces...!
EliminarMe alegro de verte por aquí, bienvenida...