miércoles, 28 de marzo de 2012

Porque, en un a lo mejor, también lo merezco

Andaba buscando una imagen que poner, la web está llena de ellas, pero... ¡ah!, recordé que en algún momento saqué una que define, casi perfectamente, lo que ando intentando decir.
¡Ya vienen -por algún sitio- las vacaciones!
¡Se han hecho rogar!, será porque cada día que pasa las espero con mayor fuerza, casi con desesperación... y... ¡tachan!, ya están ahí, a la vueltita de la esquina; una semana -de 7 días- para descansar, o para estresarte entre el asfalto y el cemento, pero, aún así, un cambio de actividad, salir de la rutina de todos los días, dejar el "curro" y sus triquiñuelas, colgar el teléfono y... ¡que llamen!
Estoy seguro de que soy un privilegiado, también -día a día- me lo gané, cuando otros se divertían, yo ponía los codos en una mesa, era de los que oía la música de la verbena estudiando a conductitas y liberales; clásicos y contemporáneos: derivadas e integrales...
Por todo ello, y para celebrar que he llegado hasta aquí, como muchos otros, ¡feliz vacaciones a todos! aunque se van, se van...

martes, 20 de marzo de 2012

La prima a su vera...


Era de esperar, allí, en mitad del majano la estaba esperando, aleteando sus llamativas poses, a ver si la "chorva" picaba, y... ¡vaya si picó!
Confundida, no sabemos si por la época o la hora en que él la reclamaba, se dejó ir, se quedó "embobada" mirándolo y en un descuido...
El resto ya lo conocemos... por esos campos, mañana revolotearán sus vástagos, repitiendo el rito, llenando de vida la estación...
La primavera, siempre primavera...

jueves, 8 de marzo de 2012

A ellas, con respeto...

Se hace difícil encontrar palabras especiales para felicitar, hoy, el trabajo de alguien que nos lo ofrece sin condiciones durante toda nuestra vida; es arduo, también, contar en este espacio todo lo que nos pueda venir a nuestras mentes para brindar nuestro incondicional respeto, a alguien que ya de por si lo tiene más que merecido.
Por eso felicitarla, por estar ahí, por vigilar  que todos nos sintamos bien, por ser compañera, amiga, madre, por ejercer mil trabajos a cada minuto, por tu incondicionalidad, por ser nuestro equilibrio, por dar de ti, todo y más todavía, por alumbrar nuestras vidas, superando dificultades, saltando barreras; y todo ello -y más- sin esperar más que nuestro agradecimiento -aún sin palabras-, tocar ese respeto, que es tuyo.
¡Felicidades...! por ser quién eres, por hacernos ser quienes somos cuando estamos contigo...